Nuestro amigo es un creyente de origen musulmán. Tiene la visión de Movimientos de Hacedores de Discípulos en su nación. Lo llamaremos Pablo *.
¿Será un fruto de Facebook?
Una de las formas en las que él llego a la gente fue a través de una página de Facebook. Un día, conoció a un hombre del sur de su país. Primero, habló a través de Messenger y luego por teléfono. El hombre era un mullah (maestro) en una mezquita. Le dijo a Pablo que había leído el Corán, pero que no había nada sobre el perdón y la salvación allí. Le preguntó a Pablo sobre la salvación en el cristianismo. Después de unos meses de hablar, dijo que sabía que el «Injil» (el evangelio de Mateo, Marcos, Lucas y Juan) era cierto. La salvación se encuentra en Isa al Masih (palabra musulmana para Jesús el Mesías). Quería ser bautizado. Comenzó a hablar con su esposa, familia y amigos de inmediato. Pablo quería que todos supieran acerca de la salvación en Isa al Masih. Un año después, la esposa del mullah estaba lista para bautizarse con otro amigo. El segundo amigo también era un mullah cuya esposa también había creído. ¡Ahora hay una «Jamaat» (reunión) en esa parte del país! Como imames, tienen una influencia real en sus comunidades. Por favor, ora por los mullahs. Muchos de ellos buscan verdaderamente a Jesús. Por eso son mullahs. Ora para que tengan la valentía de llevar las buenas nuevas de salvación a sus mezquitas.
Hussein – Antiguo Guardia de las Fuerzas Especiales
¡Aquí hay otra historia donde esto parece estar sucediendo!
Hussein * es un guardia. Es un tipo duro que solía estar en las fuerzas especiales de su localidad. Santiago * vivía en la misma calle donde él era guardia y lo saludaba cada vez que pasaba.
Un día, Santiago comenzó a hablar de Jesús. La respuesta de Hussein lo asombró. Hussein dijo: «¡Amo a Jesús!» A medida que avanzaba la conversación, explicó un hecho interesante. Su mullah, en un pequeño pueblo de la provincia vecina, tenía un libro sobre Jesús. Entonces contaba a la gente de la mezquita las historias sobre Jesús. Cuando escuchaba estas historias, Hussein lloraba. Emocionado por ver su interés, Santiago le dio una tarjeta SD con la película de Jesús. Hussein vio esta película muchas veces. Luego decidió enviar la película al imam. Unas semanas más tarde, Hussein estaba molesto. La tarjeta SD estaba circulando en su ciudad y se negaban a devolverla. ¡Hussein quería volver a ver la película! Había una solución fácil para este problema. Santiago le dio a Hussein otra tarjeta SD con la película. Ahora, han pasado meses y todavía ve la película todas las noches. No ha entendido del todo que Jesús no es solo un profeta del islam. En su momento llegará un significativo y completo entendimiento de la muerte de Jesús en la cruz. Sin embargo, su mullah definitivamente está influyendo y muchos están viendo la película. Esperamos que este imam venga a la ciudad para encontrarse con un creyente que pueda explicar el evangelio de manera más completa.
Encuentro Divino en un Parque
Abdul * es un mullah de un pueblo cercano a nuestra ciudad. Enseña el Corán en la madraza de su pueblo y también les enseña a leer a los niños. No hay escuela en el pueblo. Este líder vino a nuestro pueblo. Su esposa estaba a punto de tener un bebé y necesitaba ir al hospital. Mientras esperaba en el pueblo, conoció a un JUCUMERO. Sensible a la dirección del Espíritu Santo, Santiago sintió sentarse a su lado en un banco en el parque y le habló. Abdul había sido comandante de las fuerzas especiales de su nación, pero ahora se había convertido en mullah. Cuando Santiago comenzó a explicar el evangelio, los ojos de Abdul se llenaron de lágrimas. Él le explicó. «He estado buscando un “Injil” (Nuevo Testamento) durante 5 años». Santiago tenía un evangelio de Lucas en su bolsillo que felizmente le dio. Abdul estaba muy feliz de recibirlo. Lo besó y luego se lo guardó en el bolsillo. Un poco más tarde dijo: «¿No tienes el libro grande el “Injil” completo?» Santiago dijo que se lo daría la próxima vez que se vieran. Después de hablar un poco más e intercambiar números de teléfono, Santiago regresó a casa en bicicleta. En el camino, sintió fuertemente que debería darle a Abdul un Nuevo Testamento de inmediato. Consiguió una copia en su casa y volvió en bicicleta al lugar donde había dejado a Abdul. Abdul estaba ocupado leyendo a Lucas e incluso citó una parte que le gustó. Unos días más tarde, leyó todo Lucas y comenzó con Mateo. Él ya estaba llamando a Jesús «el Salvador» y entendió que era el sacrificio por nuestros pecados. ¿Abdul será una persona de paz que lidere un Movimiento de Hacedores de Discípulos?
¿Podrías tomar un momento para orar con nosotros por esto y por estos tres hombres?
* Estas historias tuvieron lugar en dos países de Asia de mayoría musulmana. Estos lugares históricamente han sido muy resistentes al evangelio. Para proteger a los involucrados, se han cambiado los nombres.
Un comentario
Hola Dios les bendiga, hermosas historias, me impactó mucho la de Abdul ya que tenía 5 años queriendo leer el Nuevo Testamento. Y nosotros muchas veces tenemos hasta 5 Biblias en casa y no leemos ni una. Dios tenga misericordia de nosotros.